Chingao que quejumbroso soy... De cumbres, tratados y cosas peores

El resultado final de la cumbre, todavía no sé si en realidad significo algo de provecho para los países latinoamericanos, incluso no se si beneficio al mismo pueblo de México, lo que si se es que nos dejo con un mal sabor de boca a todos por acá en Monterrey. Esta bien que algunos sectores comerciales se vieron beneficiados por la gran afluencia de personas extranjeras, sobre todos los hoteles y restaurantes. ¿Pero el resto de la ciudad? Específicamente hablando de aquellos que vivimos en las mañanas y en las noches el trafico en su versión ultra plus empeorada, aquellos que tuvieron que recorrer caminado constitución por encontrarse esta cerrada, aquellos a quienes les impidieron abrir sus negocios por estar cercanos al sector que debía estar seguro, a los que lo cerraron por el molestoso paso de los protestantes globalifobicos, a quienes trabajaban cercanos a los hoteles y que debían de ser revisados cada que querian ingresar. Muy molestoso de sobre manera para un gran numero de personas.
Espero que los acuerdos logrados, valgan la pena, que auque no hayan sido tratados puntos más importantes, los que si lo fueron, sean tomados en serio por los representantes de cada país. Que al ver el fruto de los tratados todos los que vivimos aquí digamos, “chingao que quejumbroso soy, todo eso valió la pena”